PEONES SON EL ALMA DEL JUEGO, LOS

u003cbu003e«Las horas pasaban como fuera de la realidad, en un espacio habitado por el recuerdo y la locura, donde lo pretérito estaba vivo y los difuntos eran espíritus concupiscentes.»u003cbru003eu003cbru003eu003c/bu003eUn joven de dieciocho años llega a la ciudad de México con la secreta intención de convertirse en poeta. Es el final de la década de los cincuenta. Al poco tiempo, comienza a involucrarse en la intensa vida cultural de la capital. Así, se adentra en un mundo de talleres y tertulias, de complicidades sinceras y envidias aún más hondas, cafés y torneos de ajedrez,de intrigas amorosas, vanidades y -a pesar o por encima de todo- de pasión verdadera por la creación literaria. u003cbru003eu003cbru003eEl joven habrá de convertirse, efectivamente, en poeta y en uno de los protagonistas de la literatura mexicana del siglo xx. También, circularmente, en el autor de esta novela. Por ella pasan personajes que conoció de cerca, como gente cotidiana en un ambiente cotidiano, no como monumentos: Juan José Arreola, Juan Rulfo, Octavio Paz, Elena Garro, Amparo Dávila, Gabriel García Márquez, Adolfo Bioy Casares, Philip Lamantia, Francisco Toledo, Luis Buñuel, Nahui Olin, entre muchos otros.u003cbru003eu003cbru003eu003ciu003eLos peones son el alma del juegou003c/iu003e, obra que comenzó como un diario secreto, es el vivo retrato del México de una época. Es también una lúdica novela en la que el ajedrez opera como una metáfora de la vida. u003cbu003e u003cbru003eu003cbru003eENGLISH DESCRIPTIONu003cbru003eu003cbru003e“The hours passed as if separate from reality, in a space inhabited by memory and madness, where the past was very much alive and the deceased were sensual spirits.”u003cbru003eu003cbru003eu003c/bu003eAn eighteen-year-old young man arrives in Mexico City with the secret intention of becoming a poet. It is the end of the fifties. Before long, he begins to partake and be part of the intense cultural life the capital has to offer. Thus, he enters a world of workshops and gatherings, of genuine camaraderie but with even deeper jealousies, cafes and chess tournaments, love intrigues, vanities and —despite or above all—true passion for literary creation. u003cbru003eu003cbru003e u003cbru003eThat young man would indeed become a poet and one of the protagonists of twentieth-century Mexican literature; and coming full circle, the author of this novel. Characters that he knew closely cross these pages as everyday people in an everyday environment, not as the literary greats they were: Juan José Arreola, Juan Rulfo, Octavio Paz, Elena Garro, Amparo Dávila, Gabriel García Márquez, Adolfo Bioy Casares, Philip Lamantia, Francisco Toledo, Luis Buñuel, and Nahui Olin, among many others.u003cbru003eu003cbru003eThe Pawns Are the Soul of the Game, a work that began as his private diary, is the living portrait of Mexico of a past era. It is also a playful novel inwhich chess functions as a metaphor for life.